El ransomware es la ciberamenaza que ha ido creciendo durante años, pero que finalmente llegó a la corriente principal titulares en 2017 con la infección WannaCry. Este ataque mundial afectó a empresas de todos los tamaños en todo el mundo; En particular, en el Reino Unido, el Servicio Nacional de Salud (NHS) se vio afectado.
Las organizaciones sanitarias no son ajenas a los ataques de malware y ransomware dirigidos; su dependencia de infraestructuras y sistemas obsoletos y el hecho de que un buen ataque podría poner vidas en riesgo los convierten en un blanco fácil. Los piratas informáticos dependen de la presión de arriesgar vidas para obligar a los trabajadores de la salud a realizar un pago. Si bien no se atribuyó ninguna pérdida de vidas al ataque WannaCry, tuvo un efecto significativo en el NHS.
Casi 7000 citas, incluidas operaciones y tratamientos urgentes contra el cáncer, fueron canceladas a causa del ataque WannaCry; sin embargo, el NHS sospecha que un total de 19000 personas se vieron afectadas. 81 de 236 fideicomisos en total se vieron afectados, así como 603 organizaciones adicionales del NHS, incluidas las oficinas de médicos de cabecera.
Esta infografía de Empresa de soporte de TI TSG explora el rápido aumento del ransomware, cómo puede afectar a las organizaciones sanitarias y ofrece consejos sobre cómo evitar ser víctima de esta amenaza cada vez mayor.
